CALOR HUMANO
La Argentina solidaria: ¡Lucila está en casa!

Hace tres semanas, un sábado a la noche, Fabiana Piccirilli escribió a Entremujeres pidiendo ayuda. Contó, vía mail, la historia de Lucila. Desesperada, explicó que su sobrina, de 13 años, peleaba contra el cáncer y que estaba internada, muy delicada, y que necesitaba dadores de sangre y oraciones, energía o cualquier buen deseo que alguien pudiera sumar.

Durante una veintena de días, Fabiana acercó noticias, contó cómo iba evolucionando Luli y agradeció una y otra vez las decenas de dadores que se acercaron a ayudar y las oraciones y gestos y mensajes y llamados. Decenas y decenas de personas de todo el mundo escribieron comentarios en la nota y hasta la abuela de Lucila escribió como una más agradeciendo y contando cómo iba todo.

Es más, la nota de Lucila fue la más viralizada en redes sociales (en Facebook y Twitter) en la historia de Entremujeres, que ya suma 13 meses. Más de mil personas la twittearon y retwittearon y unas 3.000 la sumaron a su muro en Facebook. La cadena solidaria se tejió en la web y creció hasta llegar a destino con la mejor de las noticias: Lucila hoy está en casa.

Domingo, mediodía helado, Fabiana volvió a contactarse: "¡¡¡Hola a todos!!! ¡¡¡Estoy feliz!!! Lucila está en casa, recuperándose, pero en casa. No hay palabras de agradecimiento para todos. No sabemos cómo devolver tanto AMOR y SOLIDARIDAD, palabras que parece que se hubieran perdido en el diccionario argentino, pero que gracias a Lucila volvimos a descubrir y a valorar. Les mandamos a todos un abrazo supergrande. La lucha continúa, seguiremos necesitando oraciones y energía, la misma que sé que Lucila les envía a todos los que con su sangre y sus mensajes hicieron posible este milagro. Infinitas gracias y lindo domingo para todos".

En el marco de esta pequeña gran historia, Fabiana nos contó una movida que se armó en torno a la difusión de la noticia y que vale la pena repetir para pensar en esa opción antes casos similares: el centro que recibía a los donantes para Lucila acordó con el colegio donde ella asiste y enviaron una ambulancia con 60 bolsas para convocar donaciones en la puerta de la institución. No les alcanzaron. En un puñado de horas más de 100 personas entregaron su brazo por Lucila. "A lo mejor la gente no tiene tiempo para acercarse, se complica. Está bueno pensar estas opciones, porque fue impresionante la cantidad de gente que se acercó", celebró Fabiana.

Feliz domingo para Luli. Y una alegría enorme que pone muy feliz a Entremujeres, por Lucila y por el hermoso país que, amoroso, solidario, abrazó a una niña y a su familia y volvió a demostrar que somos mucho mejores de lo que nosotros mismos creemos que somos.