INTERNET
La Web al servicio de la comunidad
Franco Aro tiene 11 años y sufre de ataxia neuromuscular, una enfermedad que se caracteriza por provocar la disminución en la capacidad de coordinar los movimientos. Los síntomas que padece le dificultan el habla, la escritura y el andar; pero no su intelecto. Para poder seguir estudiando necesitaba una computadora y gracias a los puentes que tiende Internet, pudo conseguirla.

lanacion.com estuvo presente en la escuela Domingo F. Sarmiento de la localidad de Tigre, en donde la familia Aro esperaba ansiosa la laptop que tanto habían buscado y, con ella, la esperanza de un nuevo futuro para su hijo y la prueba de que algunos sueños se cumplen.

"A los chicos como yo, que necesitan la computadora, quiero decirles que las cosas se hacen realidad", afirmó Franco con la seguridad de un adulto. Y mientras daba este mensaje tranquilizador, el ingeniero Luis Campos, director del Centro argentino y de Latinoamérica en el desarrollo de tecnología para personas con discapacidad (Camac) estaba llegando al colegio.

"Mi hijo tiene dañada la parte motora fina y hay movimientos que le cuestan, por ejemplo, correr o escribir. Por eso, la vicedirectora del colegio nos aconsejó que empezáramos a ahorrar para poder comprarle una computadora personal", contó Claudia, la madre de Franco, con la dulzura que la caracteriza..

Comenzó buscando dentro de Tigre a alguien que pudiese donarle lo que necesitaba y, como no lo encontró, siguió su búsqueda en el mundo virtual. Gracias a la Asociación Civil de Ataxias de Argentina (ATAR), Claudia conoció Hacer Comunidad, www.hacercomunidad.org , un espacio de Internet que ofrece la Fundación La Nación para que los usuarios puedan compartir temas que los afectan como miembros de una comunidad. En la web, Claudia escribió cuál era la situación de su hijo y la necesidad que tenía y, antes de lo que imaginaba, la respuesta llegó.

Historia de dos
Luis Campos también es usuario de Hacer Comunidad, donde intenta dar a conocer la obra de la asociación civil que dirige. Camac se dedica a desarrollar programas especiales y herramientas que puedan ayudar a personas con discapacidades físicas, sensoriales y mentales. Según el ingeniero, el objetivo de la fundación es trabajar de forma personalizada sobre las capacidades de cada uno de los destinatarios de sus programas. Por eso, cuando leyó el pedido de Claudia Aro en el sitio, Campos se contactó con ella y le ofreció a Franco la solución que buscaba. En este caso, Camac y Hacer Comunidad lo hicieron posible.

Y esta ayuda monetaria fue, para los Aro, el comienzo de un nuevo porvenir. "La compu significa que él va a poder escribir también en el cole", explicó Federico, el mellizo de Franco, que comprende claramente lo que esta nueva adquisición significa para su hermano y, entonces, lo celebra. "Yo lo ayudo porque no es fácil escribir en la computadora por primera vez", afirmó Federico con tono comprensivo.

Franco y su familia no se cansan de repetirlo; desean expresar constantemente su agradecimiento. Lo que para alguien puede ser sólo un gesto para ellos es la posibilidad de una nueva vida. Estaba emocionado y, cuando Campos sacó la notebook, corrió a sentarse en su falda para empezar a usarla. Le pidió al representante de Camac que le abriese un archivo de texto y entonces, sin que nadie supiese lo que iba a hacer empezó a escribir: "¡Conseguí la compu, gracias!", un mensaje tan emotivo como gratificante.